Avanzan en la identificación de los efectos antitumorales de la melatonina
14/06/2013El grupo de investigación del Instituto de Biomedicina (Ibiomed) de León estudia desde hace varios años las propiedades antitumorales de la melatonina, una hormona producida por la glándula pineal que tiene diversos efectos fisiológicos como la regulación de los ritmos biológicos.
La melatonina es una hormona, producida por la glándula pineal, que tiene diversos efectos fisiológicos como la regulación de los ritmos biológicos
Los expertos ya demostraron en trabajos anteriores que la melatonina estimula la apoptosis en células tumorales hepáticas de la línea HepG2, y que este efecto se asocia a un aumento en la expresión de los receptores MT1 y NQO2 (localizados en la membrana celular) y ROR-alpha (del núcleo), así como a una inducción de la proteína proapoptótica Bim a través de la entrada en el núcleo del factor de transcripción FoxO3a.
Ahora, en un trabajo recién publicado en British Journal of Cancer, los investigadores del Ibiomed, en colaboración con la Universidad de Valencia y el Servicio de Oncología del Hospital de León, han analizado la capacidad de la melatonina para inhibir la angiogénesis, “un proceso por el que se forman nuevos vasos sanguíneos para aportar oxígeno y nutrientes a las células tumorales, favoreciendo así el crecimiento tumoral y el desarrollo de metástasis”, explica Javier González Gallego.
En esta investigación se trataron células tumorales hepáticas con melatonina bajo condiciones de normoxia (cantidad normal de oxígeno) o hipoxia (falta de oxígeno) inducida mediante cloruro de cobalto. “La menor disponibilidad de oxígeno dentro del microambiente tumoral contribuye a la progresión del tumor gracias a la liberación del factor HIF1alfa, que induce la expresión de genes como el factor de crecimiento endotelial vascular (VEGF), esencial para la angiogénesis”, resume el investigador.
En las condiciones de hipoxia, “la melatonina redujo la expresión de HIF1alfa, así como su localización nuclear y actividad transcripcional”. Asimismo, “inhibió el reclutamiento del complejo transcripcional formado por HIF1alfa y los factores de transcripción STAT3 y CBP/p300 en el promotor de VEGF”. En este sentido, el efecto antiangiogénico de la melatonina se confirmó mediante el ensayo de formación de tubos en células endoteliales de cordón umbilical humano (HUVEC).
El trabajo pone de manifiesto que la utilización de la melatonina podría tener interés, al menos como coadyuvante, en el tratamiento del hepatocarcinoma, el tumor hepático de mayor frecuencia y el quinto que más casos registra en el mundo. No obstante, González Gallego apunta que “se trata de estudios de carácter básico cuya traslación a la clínica aún requiere de una profundización en las vías de señalización implicadas y de ensayos en animales, antes de poder llegar a humanos”.
Fuente: Agencia SINC